Se trata de generar un proceso en el cual se hidrata la semilla para lograr su activación.
Esta se encuentra en un proceso de hibernación guardando todas sus propiedades para esperar el momento donde se le den las condiciones optimas para germinar, tales como aumento de su proteína y vitamina.
Cuando se consume, las enzimas digestivas lo asimilan de mejor forma obteniendo mayor absorción de sus nutrientes.
Anti nutrientes
Los componentes tóxicos más comunes que se encuentran en las semillas, legumbres o frutos secos son catalogados de anti nutrientes, los principales son:
- Oxalatos: Que impiden la absorción del calcio.
- Taninos y polifenoles: Bloquean la absorción del hierro y cobre.
- Ácido fítico: Este puede interferir en la absorción de minerales, proteínas y vitaminas.
- Estos tóxicos se encuentran en los alimentos para que se adapten y estén preparados cuando se encuentren en proceso de germinación, y pueda defenderse de los hongos, plantas, entre otros.
Beneficios de la activación
- Activan las enzimas que ayudan a mejorar la digestión.
- Eliminan anti nutrientes.
- Potencian sus propiedades nutricionales.
¿Cómo consumirlo?
Se pueden hacer leches vegetales, hummus, cocinar, deshidratar, o comerlas como snack.
Semillas más utilizadas
- Almendras
- Piñones
- Nueces
- Pistachos
- Avellanas
- Semillas de maravilla
- Semillas de zapallo
- Chía
- Linaza
- Alfalfa
- Alpiste
- Avena entera
- Lentejas
- Porotos
- Quinoa
- Sésamo
¿Cómo activar las semillas?
- 1. En un recipiente, de preferencia vidrio o loza (evitar ocupar aluminio) colocar el alimento.
- 2. Cúbrelo completo de agua, debe ser hervida o tibia, no cruda.
- 3. Déjala de esa forma por un mínimo de 12 horas con un máximo de 24, preocúpate de que no tenga contacto con algún agente que pueda contaminar o ensuciar el alimento.
- 4. Retira el agua y están listas para usar.